LOS EFECTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN EL VINO, SON ANALIZADOS EN LA CONFERENCIA QUE IMPARTIÓ PANCHO CAMPO EN EL PRAE Junto a este Master of Wine, participaron el Presidente de la DO Rueda, el Director Técnico de la DO Ribera del Duero y Josefina Villa de la Universidad de Valladolid.
Vinos con más graduación, vendimias antes de tiempo, más plagas en la vid y caldos con menos ácidos y más difíciles de conservar…, son algunas de las consecuencias que el Cambio Climático está produciendo en la industria del vino, y de las que se habló en la Conferencia – Debate titulada "El Cambio Climático; Retos y Soluciones para la Industria Vinícola" que se ha celebrado hoy en el Centro de Recursos Ambientales de Valladolid.
Pancho Campo, único Master of Wine español y presidente de la Academia del Vino fue el encargado de explicar y profundizar en este tema de tanto interés para el sector del vino de nuestra Comunidad.
Junto a Pancho Campo, participaron en la Conferencia-Debate, Francisco Javier de Iscar, Presidente de la DO Rueda, Agustín Alonso, Director Técnico de la DO Ribera del Duero y Josefina Vila, Profesora de la Universidad de Valladolid y del Master de Viticultura y Enología de la Universidad Politécnica de Madrid y el de la Universidad de Vigo
Pancho Campo se ha convertido en los últimos años en un experto en el estudio de los efectos del cambio climático en la industria del vino, sus investigaciones sobre la materia han puesto de manifiesto que el cambio climático es ya un hecho, a tenor de los trabajos realizados en diversas regiones del mundo, que establecen el año 1988 como el del comienzo de los primeros síntomas del calentamiento global en el sector.
Dentro de sus estudios ha profundizado en 27 regiones vinícolas del mundo, entre las que 4 son españolas y ha constatado que ha habido un aumento de 1,2 grados de temperatura media, que la vendimia se ha adelantado una media de 8 días y se han alterado los parámetros de pluviosidad.
Otro de los fenómenos directamente relacionados con el Cambio Climático es el aumento de las radiaciones ultravioleta del tipo B, que en los humanos se asocia al cáncer de piel, y que sobre las uvas quema la piel y hace que se sequen antes, lo que da lugar a aromas no deseados en el vino.
El ascenso de las temperaturas tiene numerosas consecuencias para la viticultura y la enología actual. Los principales son el adelanto de las diversas fases del ciclo vital de la planta o la mayor exposición de la viña a enfermedades y plagas. Los cambios enológicos también son evidentes produciéndose un incremento del alcohol, entre otros aspectos.
Estas modificaciones paulatinas han tenido como consecuencia secundaria el nacimiento de nuevas regiones vitivinícolas y la necesidad de cambiar determinadas variedades a zonas de mayor altitud donde antes no se cultivaba. Es el caso de regiones como Sussex en Inglaterra, que está produciendo en la actualidad vinos espumosos de calidad con variedades internacionales y también el caso de Dinamarca donde ya se producen vinos tintos.
Otro de los efectos enológicos del Cambio Climático es la subida de la graduación alcohólica de los vinos, porque se acumula más azúcar en las uvas, que es lo que la levadura transforma en alcohol, y que, frente a los 12,5 grados de un Rioja o un Burdeos tradicional, ya se ven vinos en Aragón por encima de los 16,5%, e incluso hasta de 17 grados. También la acidez baja, porque el calor disminuye la cantidad de ácido tartárico, sube el PH y aumenta el potasio en el vino y uvas, con lo que el vino tiene menos frescor, es más empalagoso, se puede guardar menos y tienen más riesgo de contaminación microbiana.