Relojes de sol en la provincia de Valladolid

En el arco de entrada al monasterio de la Santa Espina, existen cuatro relojes de sol. No es fácil distinguirlos, de hecho, el más singular lo descubrió Antonio Sigüenza hace muy pocos años en la fachada oeste de la puerta de acceso a este cenobio.

... "Todos pensaban que la varilla de hierro que sobresalía en la pared de piedra era una palomilla de la luz", comentaba con alegría este profesor de ciencias, promotor de un proyecto educativo que localizó, en apenas un año, cerca de un centenar de relojes de sol en más de una veintena de localidades de Tierra de Campos y Montes Torozos, sólo en la provincia de Valladolid.

Esta exposición cuenta con 19 láminas que representan relojes de sol de diferentes municipio de Valladolid, cada una acompañada de la historia del reloj.

A diferencia de lo que se pueda pensar los relojes de sol han sido herramientas muy útiles hasta el siglo XX.

Algunos marcan el comienzo de las estaciones, otros marcan los turnos de trabajo, otros marcan las horas de sol, hay relojes basados en otras culturas como la babilónica o la romana.

Las láminas que tenemos ahora en el PRAE, son una parte del resultado de una gran investigación realizada durante años por Antonio Sigüenza.